lunes, 27 de junio de 2011

María

perdir que seamos complices
es caer en recursos trasnochados
o caernos de cursis, como diria un amigo
mejor seamos pomberos nocturnos
intercambiemos cigarros para sellar nuestra alianza
que, como toda alianza, no tardará en romperse
Robemos lka miel que nos dejaron en las esquinas
de las puertas de las casas que nos temen
porque sabemos amarnos ala luz de la luna
sin pudores ni occidentalismos
sin hacer la señal de la cruz antes de cada enceuntro
sin el recurso´i del pequebu asunceno
que se va a moteles
tomando la vía más oscura hacia San Lorenzo
No evitemos pasar los semaforos en rojo
saludemosle a la cana cuando rescatemos a Maria
¿Te acordás de María? Si, quien iba a decir que una cancion tan mala
sellaria un nombre perfecto para un placer
casi tan perfectro como su nombre
Recemosle un rosario a la virgen del deseo
a esa virgen no tan virgen que de amores
nunca quiere recular

Pedir que semaos complices
es un insulto a la logica de nuestra amistad
a nuestro anarquismo
que no firma papeles pero que puede demandar
porque no conoce las reglas del juego de desconocer las reglas
Desenrejemos las palzas publicas
Para repetir el amor a la luz de la luna
sin vendernos el guion de un final holywwodense para el devenir
sin proyectarnos la monogamia sucesiva
sin mamberanos demasiado en la calecita de la plaza
No evitemos cruzar el pabimento con los ojos vendados
Saludemosle al peajero, para que deje de tenernos miedo
¿Y que pasó de María? preguntás con ojos apretados
Se fue a dormir sin nosotros, repondo agobiado. Hoy solo nos deja la cancion

Resemosle un rosario a la Virgen del deseo

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